Tango de Seducción

“Pareciera que sintiendo tu cuerpo,

mi alma volara al infinito de los orgasmos,

con solo pensar en tu rostro y en tus manos,

siento como si estuvieras tocando cada parte de mi cuerpo,

juegas con cada centímetro de mi piel

y recorres cada zona oculta que muy pocos se han atrevido a explorar,

así como tu lengua entra en cada cueva oscura

y la iluminas con cada lamida que me haces,

como si a lo lejos…”

Si, a lo lejos, cheriè…

Como detesto tener dejarlo a tu imaginación y mi inspiración, gastar tal sentimiento en palabras queriendo ser yo en vez de estas.

Te deseo en la oscuridad, deseo cada gramo de tu sensualidad en mi oscuridad.

Como impedir a mis manos recorrer mi cuerpo por esas palabras, es la forma mas cercada de sentir que eres tú quien acaricia mi piel…

Pero no soy yo, son solo retazos de mi, solo palabras buscando llevarte al climax que no puedo causar con mis propio tacto.

Detestas hacerlo no es cierto? Dejarlo todo inconcluso, pero tú sigues diciendo esas cosas, tú tampoco puedes frenarte.

No puedo detenerme, ningun predicamento sería ni es obstaculo suficiente; desearia tan solo no tener que soñarte, que fueras tu y no aire lo que hay entre mis brazos.

Me Tientas en la misma forma en que provocas a mi cuerpo desearte cada vez mas y que sean tus labios quienes lo recorren en vez del aire. Tu piel morena sobre la caucasica que tapa mis venas, no te detengas…

Pense que ninguna volvería a sacar de mi lo que con facilidad me arrebatas y son solo palabras, estan poco de mi, y yo quisiera darte todo

“No hablo por solo hablar”, eso quieres decir?

Yo nunca juego a ilusionar solo con palabras, solo te planteo un preludio de lo que tú me pides a gritos con poesias.

Quererlo ya es una predisposición de poder hacerlo, y lo que nos falta es la oportunidad de alcanzarlo.

Te permito entrar en mi mente y que juegues con ella, mientras la distancia sea una barrera y solo sentirte en silencio sea lo que tenga.

Y cuando ya lo hallan barreras... No dejaré el juego ni la artimaña, me lo permitiras? Te crees capaz de impedirmelo? De no pedirmelo por tu propia ambición para satisfacer nuestro vicio…

Tranquilo, no pretendo enamorarme de ti… sabes que no debería.

Sabes que este tango es para dos o bailas o te alejas de la pista, y la música sigue.