Cuentame musa, que le susurraremos esta noche al papel,
¿que tinta bañará el deseo y lo mandará a hacerse realidad?
Dime entonces, armado de valor, ¿será mi espada un pincel?
o un lapiz, un plumón, quizas algun crayón.
Si la vida es mi papel, cual rol juego en esa obra,
dime musa, si soy el autor, que prefiero,
una sátira, una tragedia o un vodevil,
si me vuelvo dramaturgo le escribo a Dios o a la Humanidad
¿les cuento de mí o de como me sonrie la Luna?
Hay momentos en que siento que no hay lenguaje,
que no existen palabras ni letras,
solo el sentimiento,
dime musa, ¿Cómo plasmo el deseo?
si me encuentro en el olvido,
como traduzco mi desasosiego
y si sangre mana, me enamoro, me enojo,
como le cuento al papel por quíen es que yo lloro.
Y si me alma dice ya,
es porque ya no es suficiente,
porque no hay suficientes oidos, ojos ni lenguas
en el mundo,
para condensar lo que yo siento,
pero si hay tiempo
y la musa, que me ayuda con ello
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