27/1/09

Cancer

Es una palabra de seis letras, parecida a muerte... Se oculta y te acecha cual depredador, deborador de hombres. Es una palabra como caos pues ambos provocan tensión, no para mí, pues desconozco ambos. Los desconozco porque desde pequeño crecí de una manera espontanea y sabiendo que el porvenir dependía siempre del presente y que debía ver al pasado y aferrarme a lo que se aprendió de este. Es un martirio del hombre que azota no solo al hombre, porque así es la muerte, nunca azota solo a un ser, son fuego en el bosque en verano, que carcome todo a su paso y deja atras cenizas para el leñador, ursurpador del cadaver, pero apaciguador de males es casi siempre el sepulturero. Entonces más que solo uno soporta la agonía, es una carga para la familia y queridos, o en realidad, una resolución de la carga que siempre se fue, sin importar cuanto pueda uno haber legado, así es como una sombra en la mañana arrebata la vida, alejada al marido de la mujer, al padre de los hijos y nietos, al hombre del oficio y la luz del día, todo se vuelve noche, dormir y dormir, en el sueño eterno que espera el juicio final, sorbe el cual algunos se llamarían martires, fieros guerreros que enfrentaron su cruz; yo no, yo acepté la carga y me hundí con el barco, sin esperar honor alguno por ello, porque no hay necesidad de eso, todo sería una farsa y meintras la enfermedad nos consume a todos aunque a diferente velocidad, acepto el golpe al pecho, la pierna renca, la sangre brotando por doquier, y así en una pútrida y decante existencia vivo en mis recuerdos, pues de ellos aprendí que haber seguido la tradición quizas no fue lo correcto, pero fue lo que hicimos y ahora acepto que la vida te da felicidad y te la quita, te da amor y te da dolor, te da dia y te da noche, así que quizas este es el ocaso y yo soy el velero que se perdió en el mar picado y aquellos marinos llamados esperanzas ya mueren de inanición, y aquí sigo yo, listo para aceptar el porvenir de un mañana que no será mejor, todo será parte de la misma rutina que no encuentra final, hasta el momento en la creciente oscuridad en que se acerca el sueño y a todo decimos adios.

26/1/09

Capitulo XIV: La parte más oscura de la Noche

de Shakespeare aprendí dos cosas:
en primera que personas como yo,
y aunque me refiera a mí creedme
por vez primera quizas no sea todo un juego
si no tal vez la carta reveladora del final:
solo se puede vivir por una pasión
y por esta misma morir,
o seguir adelante para descubrir que te consume
y te convierte en un ser vil...
como un vodevil.

y en segunda, 
Que la política siempre se convertirá
sin posibilidad diferida por la historia,
en un juego lleno de conspiraciones,
complots y traición.
¿De qué otro modo podría ser?
ninguno,
pues entonces no sería divertido el juego.
Ni el más noble caballero blanco
puede resistirse a la 
ambiciosa, impulsiva y desdichosa
tentación de jugar.


¡Entonces aparece un sapo!
y todo aquello a lo que llamabas hogar
ahora tiene sus puertas cerradas para vos.

Y se acerca el gran finalle.

25/1/09

La ley de dos y un tercio

El recuerdo se desvanece, no se hará más fuerte...
lo sé porque desde siempre supe 
que dentro de mi había perdón para tí.
Y ahora entiendo que ella no podrá perdonarmelo,
aun cuando pueda persuadirlo a ello, no lo haré,
al menos hoy no, no tendría sentido
y no podría fingir que me siento mal por solo pensarlo.
Lo entiendo porque Pandora y Icoa nunca fueron iguales,
y nunca se merecieron el dolor de tener que estar ligadas
y mucho menos que el nexo fuese yo...
oh, cuanto aprendí en ese momento vacío, como este.

Supe entonces que mal que bien siempre hay que decir adios
pues una puerta entreabierta o mal cerrada
siempre deja salir lo de adentro
o deja entrar lo de afuera
en el sueño acarreado por rafaga de viento que ni una rama agitó.

7/1/09

Capitulo XIII: Dos cartas mas para el Poker

Aprende a diferenciar las personas sabias de las personas inteligentes:
Los inteligentes son aquellos individuos
que conocen bien sus dotes
y no son pocos ni pocos son sus dotes
los cuales aprenden a desarrollar y emplear
utilizandolos para el bien, 
aquello en lo que confían está bien:
su bien

Los hombres sabios son aquellos
que desarrollan sus conocimientos
y destrezas para alcanzar el virtuosismo infinito
hazta saciar su sed;
El conocimiento es un poder
cual vino añejo que sacia la sed 
pero inconcientemente producirá mas ancidad,
Lo que los diferencia
y recalco aquí,
que depende del vos definir
qué está bien y qué está mal;
Es que los sabios, viciosos del conocimiento,
no conocen otra solución a su sed
que la transmisión misma de sus conocimientos.

Tenemos así querido espectador,
a dos tipos de individuo:
el que obra por ambición y el que obra por obrar.


La biblia por ejemplo,
fue un libro escrito por sabios
pero elaborado por hombres inteligentes.